Si hay una posición complicada en los equipos de Garitano y que ha no terminado de funcionar en las dos temporadas que ha cumplido el Leganés en Primera es el hombre referencia en ataque. Es la ubicación que más falla a los equipos de mitad de tabla y la más cara de cubrir, pero los números en ataque del CD Leganés este año son para hacérselos mirar.
Los pepineros han sido el cuarto equipo menos goleador de la categoría e, incluso el Deportivo, ha logrado materializar 4 tantos más. Tan solo Espanyol y los colistas Málaga y Las Palmas tienen un peor bagaje. Pero los malos datos no acaban ahí, solo hay que analizar los goles de sus delanteros centros; entre Amrabat, Guerrero y Beauvue no llegan a la decena.
Indicativo es que ninguno de los tres van a continuar esta temporada defendiendo los colores blanquiazules, aunque el único que tenía oferta de renovación era Guerrero y ha sucumbido ante la mejora de contrato sustancial en Turquía.
Amrabat: excelentes cualidades y poco gol
Miguel Ángel Guerrero: Un nueve de área clásico
El español es el que menos calidad tiene de los tres puntas, es el clásico tanque de área que se pega con los centrales. En el comienzo liguero fue indiscutible para el técnico vasco, siendo titular en las cinco primeras jornadas y estrenándose en la tercera fecha. Luego estuvo fuera de los terrenos por decisión técnica durante diez partidos para reengancharse en el último tramo.
Anotó 4 goles y asistió en 3 ocasiones para un total de 1.438 minutos, repartidos en 12 partidos. Los registros se vieron maquillados con dos tantos en las jornadas 32 y 37.
Guerrero nunca terminó de sentirse titular, pero siempre fue una de las piezas disponibles para cuando los partidos eran cerrados, calientes o la opción del doble 9 que ha utilizado a veces Asier.

Guerrero celebrando otro gol. Foto vía laliga.es
Beauvue: Inicio fulgurante que se deshizo muy pronto
El francés empezó la temporada como un tiro y nos dejó entrever que era el killer que tanto ansiaban los pepineros. Marcó en las jornadas 6 y 9 para enamorar a una afición que se veía peleando por Europa. Rápido al espacio y corpulento para pelear balones en largo parecía el hombre ideal para esta posición. Aún así fallaba goles de los que no puede perdonar un jugador que dispone de tan pocas ocasiones.
A pesar de disputar hasta un total de 28 partidos y 1.670 minutos, no fue capaz de dar ninguna asistencia ni de marcar más allá de la jornada 9. Números erráticos para el hombre referencia de un equipo de Primera.
Gozó de más oportunidades que el resto de sus compañeros pero fue perdiendo protagonismo cuando Garitano optó por jugar sin un nueve de referencia.